APRENDE A ACOMODAR LOS MUEBLES para darle personalidad a tu casa
Es importante que al aprender a acomodar los muebles hay que tener en cuenta las necesidades que cada espacio debe cumplir.
Prueba diferentes combinaciones
Para comenzar, es muy útil dibujar sobre un plano la disposición que tienes en mente y probar con diferentes combinaciones. Algo que puede ser muy práctico es dibujar y recortar los muebles; así podrás colocarlos en diferentes disposiciones hasta que logres el diseño deseado.
Cuando empieces a acomodar los muebles y la decoración, es importante que elijas un punto central en la habitación, el cual puede ser una ventana, la chimenea o un muro diferente a los demás. Después tienes que definir para qué se va a usar ese cuarto y el mueble que tendrá mayor peso en la decoración. Por ejemplo, en la sala será el sofá el que tenga el protagonismo, mientras que en el dormitorio ser la cama la que tenga mayor relevancia, por su parte en el comedor han de ser la mesa y las sillas las que sean el punto central del amueblado. Una vez que hayas definido lo anterior, orienta el mueble principal hacia el punto central del espacio.
La clave para en el diseño de interiores es la colocación de los muebles
Una parte esencial para convertir un cuarto en un hogar es la colocación de los muebles, ya que le dará vida y personalidad a los espacios.. Si tu casa es pequeña, tanto el tipo de muebles como la forma de colocarlos, va a ser muy diferente a lo que podrías aplicar en una casa grande.
En base a lo anterior y a la actividad a la que el cuarto será destinado, coloca el resto de los muebles. Esta planeación es particularmente importante, ya que si estamos hablando de la sala, lugar en dónde recibimos visitas, debemos pensar en que haya suficientes mesitas o muebles similares en donde se puedan colocar vasos y platos.
También debes tomar en cuenta las fuentes de luz natural, sean ventanas o tragaluces, ya que esos espacios son más adecuados para tener una mesa de trabajo o para hacer las tareas de los niños. En cambio, si colocamos las camas en donde no entra la luz del sol de manera directa, en especial en las mañanas, será mucho más cómodo para descansar, particularmente los fines de semana que es cuando uno puede dormir hasta un poco más tarde.
La luz, ya sea natural o artificial puede hacer que los muebles luzcan mejor
Esto también aplica a los colores de los muros y los cuadros. Es muy importante que a cada espacio de la casa se le imprima la personalidad de cada miembro de la familia, así como sus preferencias y necesidades.
A la hora de elegir los muebles que vamos a colocar en nuestra casa debemos cargar siempre con una cinta métrica para que tomes medidas tanto de los muebles como de los cuartos. Si te das cuenta que el mueble que tenías pensado comprar es demasiado grande para la habitación, no lo compres, aún cuando te hayas enamorado de él, ya que en el futuro sólo te ocasionará problemas de espacio.
También toma en cuenta las medidas de las puertas, ya que es muy común que un mueble no pueda entrar en una casa debido a que es demasiado grande para la puerta de entrada. Además toma en cuenta el ancho de los pasillos y las escaleras que llevan al cuarto en donde colocarás los muebles.
Por otro lado, debes calcular el volumen de cada mueble, esto es, su altura, su ancho y profundidad. De esta forma tendrás una idea de la escala de cada objeto con el fin de armonizarlos en una habitación. Y es que cuando los muebles tienen escalas diferentes entre sí y con respecto a la habitación, el conjunto simplemente no luce bien. Por ejemplo, si colocamos un tapete demasiado chico para el espacio, o un mueble monstruoso, notarás que la habitación no será acogedora.
Entre cada objeto debe haber un balance, el cual puede ser simétrico o asimétrico
La simetría bilateral funciona como el cuerpo humano, siempre hay dos cosas iguales
Esto es para crear un efecto de balance. Por otro lado, la asimetría se refiere a una falta de balance que se hace a propósito con el objetivo de crear un efecto visual de movimiento y vitalidad.
Puedes crear dos o más ambientes
También toma en cuenta que un espacio puede ser dividido para crear dos o más ambientes diferentes o zonas funcionales dentro de la misma habitación. Digamos que tienes un gran espacio rectangular; este puede ser dividido en dos para crear un par de zonas con diferentes funciones. Así que puedes usar como división un sillón para tener un espacio que te servirá para reuniones y del otro lado un lugar para tener un comedor. Y si el espacio es lo suficientemente grande puedes crear varias zonas funcionales divididas en cuadrados. La razón de esto es que los humanos tendemos a sentirnos más cómodos en zonas pequeñas y cuadradas que en espacios grandes y rectangulares.
Si te gustó la información, ¡ayúdanos a compartir!. También te invitamos a dejar tus comentarios
Comentarios